Género: Narrativa
Traducción: Aurora Echevarría
SINOPSIS:
En el centro de esta deliciosa novela hallamos a Del Jordan, una chiquilla que vive con sus padres en el pueblo de Jubilee y nos narra su día a día, su relación con la familia, los vecinos y los amigos. A través de sus ojos observamos el mundo y compartimos el provecho que saca de lo que ve. Del compadece la poquedad del padre, admira el arrojo de la madre y comprende que tarde o temprano llega el momento en que hay que elegir entre una risueña mediocridad -hogar, iglesia, matrimonio, hijos- y otras opciones más interesantes y arriesgadas. Ese descubrimiento es también el de la vocación literaria, una suerte de llamada, de deber para con el mundo.
OPINIONES:
OPINIONES:
Es el primer libro que he leído de esta autora y me ha encantado, me ha parecido muy bueno. Es una escritora que suele escribir relatos, ésta parece que es su única novela, aunque creo que cada capítulo podría ser leído como relato independiente, manteniendo en común personajes y ambientación. La novela se sitúa en Canadá, en un ambiente rural, a mediados del siglo XX. Está narrada en primera persona por Del, una niña que nos va contando su vida y a través de la cual vamos conociendo personajes y escenarios variados. Me ha gustado especialmente cuando se traslada a vivir del campo a la pequeña ciudad de Jubilee, ya adolescente, y vemos no sólo su vida cotidiana sino todo el proceso interior de crecimiento emocional, preguntas y descubrimientos de una adolescente, sobre la religión, la amistad, el sexo… y cómo va siendo consciente del tipo de vida al que una mujer está abocada según las convenciones sociales y que ella empieza a cuestionarse. Está narrado excepcionalmente bien, con descripciones muy buenas y algunos fragmentos soberbios. Es una escritora que me ha cautivado y pienso seguir leyéndola. Muy recomendable.
Esther Rodríguez
"La vida de las mujeres" es una novela muy cercana y cálida, que se basa en la cotidianeidad. Ambientada en el pueblo canadiense de Jubilee, narra el día a día de Del Jordan, una niña que está dando el paso a la adolescencia, y con ella a los descubrimientos propios de esa etapa. Sin embargo, en la novela no únicamente somos partícipes de la vida de Del, sino también del resto de mujeres de su familia y de su entorno. En ese sentido el título del libro es muy ilustrativo, pues Munro trata de plasmar, en cierta medida, la vida de las mujeres en ese entorno rural, con sus similitudes y diferencias.
Me ha gustado especialmente el personaje de la madre de Del, una mujer culta, atea y atípica que vuelca su ilusión en la venta de enciclopedias, y no encaja para nada en la sociedad en la que le ha tocado vivir. Sirve de contrapunto para tantas otras mujeres que se han acostumbrado a otro modo de ver su futuro, un futuro que pasa irremediablemente por el matrimonio, cuanto antes mejor.
Destaca especialmente lo minucioso y detallado de las descripciones, la habilidad narrativa de Munro, y la calidez que logra transmitir a través de las palabras de Del.
Destaca especialmente lo minucioso y detallado de las descripciones, la habilidad narrativa de Munro, y la calidez que logra transmitir a través de las palabras de Del.
Ana Rayas
Es lo primero que leo de la autora y me ha gustado mucho, si bien entiendo que su forma de narrar y lo que cuenta no puede convencer o interesar a todo el mundo.
En “La vida de las mujeres” nos sumergimos en las vivencias de Della y su familia, en un entorno humilde de la población de Jubilee, Canadá. Della es una niña que a partir de la observación y del cuestionamiento de los actos de las personas cercanas irá madurando y haciéndose mujer.
A lo largo de los capítulos, que podrían leerse como un relato, cada uno por separado, Della nos describe a algún integrante o acontecimiento de la familia, relata los encuentros con sus compañeras o compañeros de clase, de la ciudad, del día a día, deteniéndose, en ocasiones, en los detalles en apariencia insignificantes de lo cotidiano.
El relato de Della comienza cuando habita en la granja de sus padres, en un lugar apartado del avispero de la ciudad, donde terminará finalmente. Los capítulos dedicados a la vida en el campo son curiosos, pero sobre todo sirven para presentar y definir a los personajes centrales (digo centrales porque son los personajes femeninos con más presencia), la propia Della y la madre de ésta. Pienso que la madre es un personaje muy emblemático, dicho sea de paso, ya que en todo el texto se muestra una mujer muy avanzada para la época, inquieta, ávida de un conocimiento cuya adquisición le fue negada por circunstancias de la vida y consecuencia de los roles asignados a las mujeres de aquel tiempo (inicios siglo XX). En el momento en que la vida de Della se desarrolla en la ciudad, el tono se vuelve más enigmático, ya se hace mujer y con ella crece su sed para explorar sus metas como tal, su feminidad, su cuerpo, el sexo. Es la parte más significativa en mi opinión.
Me ha encantado el estilo de Munro a la hora de narrar momentos clarificadores e íntimos, como mantiene un aura ambigua y enigmática, sin resolver al completo la manera en que los personajes los afrontan, porque eso debe aportarlo la comprensión del lector. También me ha gustado como, de la variedad de mujeres que surgen en la novela, puedes sentirte identificada en algún aspecto con todas ellas o sino intentar comprenderlas. Asimismo, al contrario de otras opiniones que lo consideran frío, pienso que "La vida de las mujeres" contiene fragmentos hermosos y frases con mucha más profundidad de la que parece.
Nuevamente aplaudo la decisión de la Academia sueca por otorgarle el Nobel de Literatura este año a una mujer y que además, bajo mi punto de vista, es excelente narradora.
A lo largo de los capítulos, que podrían leerse como un relato, cada uno por separado, Della nos describe a algún integrante o acontecimiento de la familia, relata los encuentros con sus compañeras o compañeros de clase, de la ciudad, del día a día, deteniéndose, en ocasiones, en los detalles en apariencia insignificantes de lo cotidiano.
El relato de Della comienza cuando habita en la granja de sus padres, en un lugar apartado del avispero de la ciudad, donde terminará finalmente. Los capítulos dedicados a la vida en el campo son curiosos, pero sobre todo sirven para presentar y definir a los personajes centrales (digo centrales porque son los personajes femeninos con más presencia), la propia Della y la madre de ésta. Pienso que la madre es un personaje muy emblemático, dicho sea de paso, ya que en todo el texto se muestra una mujer muy avanzada para la época, inquieta, ávida de un conocimiento cuya adquisición le fue negada por circunstancias de la vida y consecuencia de los roles asignados a las mujeres de aquel tiempo (inicios siglo XX). En el momento en que la vida de Della se desarrolla en la ciudad, el tono se vuelve más enigmático, ya se hace mujer y con ella crece su sed para explorar sus metas como tal, su feminidad, su cuerpo, el sexo. Es la parte más significativa en mi opinión.
Me ha encantado el estilo de Munro a la hora de narrar momentos clarificadores e íntimos, como mantiene un aura ambigua y enigmática, sin resolver al completo la manera en que los personajes los afrontan, porque eso debe aportarlo la comprensión del lector. También me ha gustado como, de la variedad de mujeres que surgen en la novela, puedes sentirte identificada en algún aspecto con todas ellas o sino intentar comprenderlas. Asimismo, al contrario de otras opiniones que lo consideran frío, pienso que "La vida de las mujeres" contiene fragmentos hermosos y frases con mucha más profundidad de la que parece.
Nuevamente aplaudo la decisión de la Academia sueca por otorgarle el Nobel de Literatura este año a una mujer y que además, bajo mi punto de vista, es excelente narradora.
Dolors Martínez
Me gustó mucho esta novela -o grupo de relatos con la misma narradora-protagonista-, más que "Mi vida querida", y eso es decir bastante.
ResponderEliminarConociendo ya los relatos considerados autobiográficos por parte de la autora en "Mi vida querida", no pude evitar leer "La vida de las mujeres" como si su protagonista, en lugar de Del, fuera la propia Alice contando su infancia y adolescencia, porque encontré varias coincidencias.
La recomiendo, sin dudarlo.