"El gran Gatsby", de Francis Scott Fitzgerald

FICHA TÉCNICA:

Género: Narrativa

Traducción: E. Piñas

Editorial: Debolsillo

SINOPSIS:

El gran Gatsby es un retrato de la era del jazz que captura el espíritu de la generación de Scott Fitzgerald y le concede un trono permanente en el Olimpo de la literatura estadounidense. El millonario hecho a sí mismo, Jay Gatsby, personaliza una de las obsesiones del autor y de la sociedad de su país: la combinación de dinero, ambición y lujuria como promesa de nuevos comienzos. Una extraordinaria fábula -y como tal, no exenta de moraleja- sobre el sueño americano.

OPINIONES:

Lo leímos en el Club de Lectura en junio de 2013.

Se trata de una novela no muy extensa, que se lee fácilmente. En ella, mediante un estilo descriptivo repleto de simbolismos y detalles cotidianos, Fitzgerald recrea el ambiente de la alta sociedad norteamericana de los años 20 del pasado siglo XX. 
El narrador de la historia es Nick Carraway, nexo de unión de Gatsby y el resto de personajes principales de la novela. Tal y como el mismo lo vivió, en primera persona, Carraway nos descubre paulatinamente el modo de vida y la enigmática personalidad de Gatsby en el tiempo que compartieron. 
El relato transcurre en el año 1922, en época de bonanza económica, especialmente para EEUU, que tras la Gran Guerra y con los recursos de media Europa diezmados, es el país con mayor movimiento de capital. 
En este contexto de opulencia viven los protagonistas de la citada novela, si bien unos son más ricos que otros. Los hay ricos por herencia (por naturaleza), mientras hay quien se ha hecho rico por medio de trabajar en la banca o en negocios más o menos lícitos donde se mueve gran cantidad de dinero. El contraste ante estos dos mundos se hace evidente a medida que se avanza en la lectura. 
Será que mis expectativas eran muy bajas, pero me ha parecido una lectura interesante, en la que el autor estadounidense consigue plasmar de una manera notable y crítica, sin llegar a ser obra maestra, una sociedad vulgar, superficial, ficticia, sobrepasada, que vive por el goce del momento en un universo de ensueño, aunque inestable, gracias al dinero. 
El “pero” que le pondría es la falta de emoción, ya que la trama apenas alcanza intensidad hasta los últimos capítulos, además de que la figura de Gatsby, un hombre hecho a sí mismo, con sus fortalezas y debilidades, puede decepcionar por el modo de actuar. Recomendable, pero con ciertas reservas.

Dolors Martínez

Novela ambientada en los años veinte. Gran parte del libro es una descripción de una clase alta frívola y sin sentido. Y en medio de esa sociedad el protagonista es un personaje misterioso, extravagante, soñador y persistente, cuyo único objetivo es recuperar un gran amor de juventud, y con ese propósito enfoca su vida. Trágicas circunstancias se interponen en su camino...
Me quedo con una frase del libro como resumen: 

"Había pagado muy alto precio por haber vivido demasiado tiempo con un solo sueño". 

Un libro imprescindible de la narrativa americana del s.XX.

Esther Rodríguez

Disfruté la novela de punta a punta y espero poder leerla en algún momento en la versión original (por lo poco que he comparado me pareció que la traducción no le hace justicia).
La historia te mete de lleno en una época de opulencia y banalidad, en la burbuja que se vivió en esa época. La crítica a parte de la alta sociedad estadounidense es indirecta, subyace en el argumento, en la descripción de los personajes, en el ambiente que se retrata, en los diálogos.... No son necesarias opiniones claras por parte del autor, sin embargo hace que resulte fácil llegar a una conclusión sobre su parecer.
Ahora toca ver las adaptaciones cinematográficas...

Silvina Romano

El gran Gatsby es una novela corta, sencilla y de grata lectura. En mi caso, la fama que arrastra y el hecho de ser considerado un clásico de la literatura estadounidense ha podido resultar negativo en su lectura, al elevar demasiado las expectativas. En cualquier caso, es una obra con muchos aspectos interesantes. Ambientada en el Nueva York de los llamados felices años veinte, incide mucho en la caracterización de esa época, tan llena de lujos y excesos, y tan vacía a la vez. A mi juicio, la novela va de menos más: los primeros capítulos adolecen de falta de acción, aspecto que se corrige en la recta final de la obra. Lo que más me ha marcado de su lectura es el propio Jay Gatsby, y sobre todo la manera en que Francis Scott Fitzgerald retrata aquella sociedad por medio de un personaje tan aparentemente integrado en la misma, y tan alejado a la vez.

Ana Rayas