"Los muertos no pagan IVA", de Sergio S. Morán

FICHA TÉCNICA:

Género: Narrativa
Editorial: Autoedición

SINOPSIS:

Verónica Guerra es detective paranormal. Es a quien recurres cuando intentas cazar gamusinos o cuando un licántropo intenta cazarte a ti. Es dura, con recursos, imparable, y necesita unas putas vacaciones.
Acompañaremos a la detective por Madrid, lejos de monstruos, tiroteos y demás rutina. Pero su paz se verá constantemente interrumpida por corrupciones inmobiliarias, saqueos de conventos y tráfico de almas.
La detective tiene que enfrentarse a la cruda realidad: su pasado y sus enemigos no la dejarán descansar.
Ni muertos.

OPINIÓN:

Verónica Guerra, alias Parabellum, es la detective a quien recurres cuando intentas cazar gamusinos o te persigue una Gorgona. Es una mujer dura, con mil recursos, pero que necesita coger vacaciones de una puñetera vez.
Tras una complicada misión decide pasar unos días descansando en Madrid, alejada de monstruos y tiroteos. Pero pronto se da cuenta de que ni su pasado ni sus enemigos, aunque estén muertos, la dejarán descansar.
“Los muertos no pagan IVA” es el segundo caso de la detective Parabellum. Un caso aún más loco que el anterior en el que se mezclan reliquias, lugares de poder, licántropos y metros fantasmales, entre otros cientos de fenómenos y seres sobrenaturales.
Como no podía ser de otra manera, nuestra detective rubia favorita, se mete de cabeza en un enorme berenjenal armada con su Glock, sus runas y su escaso sentido común. Para más inri, esquivando a su madre que tiene una visión bastante crítica (siendo amable) de su trabajo.
Esta nueva entrega de la detective más irreverente del panorama literario está ambientada en Madrid. Pero nos muestra una ciudad bastante diferente a la que conocemos, con líneas de metro bastante peculiares y bares en los que la parroquia no es tan humana como parece.
Una nueva locura de Sergio Sánchez Morán con el que os reiréis a carcajadas y aprenderéis un montón de cosas útiles como no dejar pasar nueve metros por lo que pueda pasar o que a veces si una persona parece un zombi y se mueve como tal, puede serlo en realidad.

Ana G. Aranda