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17 de marzo de 2013

"El cielo es azul, la tierra blanca. Una historia de amor", de Hiromi Kawakami

FICHA TÉCNICA:
Género: Narrativa
Traducción: Marina Bornas Montaña
Editorial: Acantilado

SINOPSIS:
Tsukiko tiene 38 años y lleva una vida solitaria. Considera que no está dotada para el amor. Hasta que un día encuentra en una taberna a su viejo maestro de japonés. Entre ambos se establece un pacto tácito para compartir la soledad. Escogen la misma comida, buscan la compañía del otro y les cuesta separarse, aunque a veces intenten escapar el uno del otro: el maestro, en el recuerdo de la mujer que un día lo abandonó; Tsukiko, en un antiguo compañero de clase. Con una prosa sensual y despojada, Kawakami nos cuenta una historia de amor muy especial: el acercamiento sutil de dos amantes, con toda su íntima belleza, ternura y profundidad. Todo un descubrimiento literario.

OPINIONES:
Me ha gustado bastante, aunque al principio no acababa de meterme en la historia. Nos cuenta la historia de Tsukiko, una mujer solitaria, que le cuesta el contacto con la gente, no convencional, que un día, por casualidad se encuentra en un bar con un maestro que tuvo en la infancia y ve que tienen muchas cosas en común. Entre los dos se va forjando una peculiar relación, que muy lentamente se va consolidando. Vemos las dificultades, dudas, miedos, que van surgiendo entre ellos, a medida que avanza el libro nos vamos metiendo más en la historia y nos sentimos más identificados. Hay sensaciones muy bien plasmadas, el nerviosismo, el miedo al rechazo, el intento de olvidar... Me ha dejado una buena sensación, esta novela, me ha gustado, es muy sencilla y delicada.

Es una historia intimista, al más puro estilo nipón. El ritmo es pausado y la prosa detallista, muestra de que es en las pequeñas acciones y gestos nimios donde se encuentra la esencia de las cosas. La narración transcurre en pasado y cuenta la relación que nace entre Tsukiko, la narradora-protagonista, y su antiguo profesor de instituto. En un inicio se hace difícil entrar en el relato, debido a la sobriedad de los diálogos, del entorno y las numerosas referencias a platos típicos u otros pormenores propios del país, pero a medida que se avanza en la lectura las emociones de los dos personajes principales se hacen más comprensibles e intensas, hasta convertirse en una bella historia de mutuo entendimiento y cariño entre ambos. Muy recomendable.
Dolors Martínez

Es una novela que tenía pendiente hace tiempo y que me ha sorprendido muy gratamente.
En la mejor línea de la narrativa japonesa (lenta, pausada, sutil) se trata de un emotivo y bello relato en el que los dos protagonistas, seres incompletos y solitarios, comparten pequeños momentos cotidianos de complicidad, sabores, olores, paseos, compañía, bebida, comida exquisita (todo un homenaje al sake y a la reputada cocina japonesa) mientras durante sus encuentros y también sus desencuentros, entre ellos va surgiendo una intimista y peculiar historia de amor.
Sencilla, emotiva, delicada, entrañable…
Me ha encantado.
Yolanda Castilla Galdos

Terminé de leer "El Cielo es Azul, la Tierra Blanca", de la japonesa HIROMI KAWAKAMI (Tokio, 1958). Insólita escritora, cuya formación profesional se dio en las ciencias biológicas, quien a la edad de 38 publica su primera novela, generando gran interés y oportunidad de crecimiento. El presente libro, publicado en 2001, ganó el codiciado Premio Tanizaki, se convirtió en un éxito de ventas y se adaptó al cine en Japón dos años más tarde.
Esta, es una intensa y aséptica novela de amor, quizá no entre dos personas, sino entre dos mundos, o entre dos épocas. Kawakami contrasta el mundo actual, lleno prisas, despersonalización y omnipresente tecnología, de basta oferta de alimentos y placeres instantáneos, con un mundo -acaso ya perdido- de tiempos lentos, llenos de contemplación, degustación y rituales, de protocolos, de apreciación por la naturaleza, rodeado de memorias, haikus, autosuficiencia y apego a la naturaleza.
La más improbable historia de amor se gesta con una intensidad sorprendente, carente de atracción física, de flirteos o de seducciones.
Dos mundos que encuentran un punto de reunión, que lleva a la comunión e inevitablemente a la intimidad.
Dos solitarios, a la vez resignados a, a la vez rebeldes, protestan contra "el mundo" bebiendo grandes cantidades de alcohol, y con comida sana.
A lo largo del texto se consumen enormes cantidades de sake, tofu, cerveza, algas, sahimi, ramen, sushi y el placer de prepararlos, antes que degustarlos.
Rafael Ugalde

Novela japonesa narrada en primera persona y en retrospectiva por Tsukiko Omachi, una mujer cerca de los cuarenta y que un día se encuentra en una taberna a su antiguo profesor de japonés del instituto. La diferencia de edad, de unos treinta años, no será impedimento para que Tsukiko y el “maestro” —como ella le llama— coincidan a menudo y compartan comida e ingentes cantidades de sake. Es la historia del acercamiento de dos seres solitarios, con sus encuentros y desencuentros, contados con mucha sutileza.
El estilo es lento, sobrio y delicado, lleno de pequeños momentos cada vez más importantes. Como curiosidad, quiero indicar que el título original en japonés es “Sensei no Kaban” —“El maletín del profesor”—, que me parece más congruente con el relato. Hiromi Kawakami ganó, con esta novela, el Premio Tanizaki en el año 2001.
Una historia sencilla, escrita con delicadeza y poesía, y de estilo muy japonés. Me ha gustado, aunque solo la recomendaría a los lectores que ya han tenido contacto previo con la literatura nipona.
Esther Rodríguez

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