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3 de junio de 2021

"La soledad del lector", de David Markson

la soledad del lector david markson
FICHA TÉCNICA:
Género: Narrativa
Traducción: Laura Wittner 
Editorial: La bestia equilátera

SINOPSIS: 
Un hombre se propone familiarizarse con el espacio que habita. Mientras observa el movimiento a su alrededor, lee, acumula citas y toma apuntes. Escritores, filósofos, artistas, la historia del arte y la cultura. Crea, con pocos elementos, una especie de teatro de cámara con dos personajes, el Protagonista y el Lector, y una playa o un cementerio como escenarios posibles. Ese es el relato aparente de esta novela, su engañosa superficie. A poco de avanzar, las citas y los apuntes nos van asomando a un universo en el que debemos desplazarnos como en el tablero de un juego misterioso, tal vez genial, cuyas piezas son la vida, la muerte, el amor, el suicidio, la enfermedad, el arte como juego, el arte como extrema experiencia vital.
David Markson, quien debutó en la década del sesenta como uno de los más avezados narradores de género —policial, western—, encontró en los últimos años de su vida la clave única de un proyecto narrativo sorprendente por la sencillez de sus recursos y admirable por su alcance y profundidad.

OPINIÓN:
“Durante más de setenta años Pablo Casals empezó el día tocando Bach.
He venido a este lugar porque allá no tenía ninguna clase de vida. Yo, ¿y el Lector? El Lector ha venido a este lugar porque allá no tenía ninguna clase de vida.
Ayer alguien lo saludó con la cabeza por la calle.
Anna Ajmátova tuvo una aventura con Amadeo Modigliani en París en 1910 y 1911. Ya en la vejez, sin haber vuelto a salir de Rusia por un tercio de siglo, quedaría atónita al enterarse de lo famoso que había sido”.

Del autor David Markson (20 de diciembre de 1927 - c. 4 de junio de 2010) poeta, novelista, periodista, editor y profesor judío-estadounidense, autor en busca armonía estética por medio de literatura posmoderna y experimental, he leído y releído este extraño libro que me fue recomendado por una amiga muy especial.
Digo que es extraño porque aunque está catalogado como novela, es una especie de rompecabezas que no hay que armar, sino que ir disfrutando pieza por pieza.
Hay piezas que son de retazos de la vida de los dos personajes: El protagonista y El Lector.
Otras piezas corresponden a una lista interminable de datos, pero que van apareciendo de uno en uno ... se trata de autores y personalidades famosas que fueron antisemitas.
Otra lista muy grande es la de personajes conocidos o escritores que se han suicidado y cómo lo han hecho ... también estos datos van intercalados con las otras piezas del puzzle ...
Hay partes que son sentencias o citas.
Otras porciones corresponden a datos biográficos o chismes de la vida de escritores y poetas o figuras universales.
En fin, es una lectura interesante y adictiva, pero de novela tiene muy poco ... instantáneas de los protagonistas que no nos explican mucho y que hay que ir hilvanando para captar una trama inexistente ... que hay que adivinar o leer entre líneas.
La recomiendo para los imaginativos que quieran experimentar con una lectura diferente, instructiva e intelectual. A mí me encantó.

“NADIE VINO, NADIE LLAMÓ.
Byron tenía nueve años cuando su niñera, una tal May Gray, lo introdujo en el sexo.
En 1811 un inmenso retablo de Cimabue de una Madonna con ángeles, que desde entonces ha sido el más bello exponente del siglo XIII en el Louvre, fue comprado en Toscana por cinco francos.
O lente, lente currite, noctis equi!
¿La diacronía diegética de la novela fue verdaderamente dañada por Flaubert, como dice Lyotard?
Diegético, dialógico, hegemónico. Privilege, como verbo. Foreground, como verbo. Valorizar. Praxis. Simulacra. Metaficción. Logocentrismo. Falocentrismo. Discurso. Significante/significado. Aporía. Capitalismo tardío. Ginofobia. Texto. Ninguno de los mencionados”.
Lucila Argüello

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