Género: Narrativa
Traducción: Susana Constante
Editorial: Alfaguara
SINOPSIS:
Momo es una niña con un don muy especial: sólo con escuchar consigue que los que están tristes se sientan mejor, los que están enfadados solucionen sus problemas o que a los que están aburridos se les ocurran cosas divertidas. De repente, la llegada de los hombres grises va a cambiar su vida. Porque prometen que ahorrar tiempo es lo mejor que se puede hacer, y pronto nadie va a tener tiempo para nada. Ni siquiera para jugar con los niños. Momo es la única que no cae en la trampa, y con la ayuda de la tortuga Casiopea y del maestro Hora, llevará al lector a una aventura fantástica llena de enseñanzas sobre la amistad, la bondad y el valor de las cosas sencillas. En definitiva, sobre lo que de verdad nos hace felices.
OPINIONES:
Fue la lectura de mayo de 2020 en el Club de Lectura.
Igual que tengo grandísimos recuerdos de la lectura de “La historia interminable” cuando era pequeña, no tengo ninguno de este otro libro del mismo autor, por lo que deduzco que o bien no lo leí o si lo hice fue un ejemplar de la biblioteca que no me dejó tanta impresión como los propios (que leía y releía). No obstante me ha encantado leerlo ya de adulta. Me ha parecido una historia fantástica en que una peculiar niña, que parece sacar todo lo bueno de los que se le acercan, deberá enfrentarse a un ejército de hombres grises que se dedican a robar sigilosamente el tiempo a los humanos. Destacaría, aparte de la imaginación que desborda el relato, esa crítica implícita a este mundo moderno en que parece que no hay tiempo para nada y que no se aprecian los pequeños placeres cotidianos. Una pequeña pausa en las lecturas cotidianas que te hace sonreír y volver a ese mundo de fantasía de la infancia. Según la contraportada está recomendado a partir de 12 años. Muy recomendable.
OPINIONES:
Fue la lectura de mayo de 2020 en el Club de Lectura.
Igual que tengo grandísimos recuerdos de la lectura de “La historia interminable” cuando era pequeña, no tengo ninguno de este otro libro del mismo autor, por lo que deduzco que o bien no lo leí o si lo hice fue un ejemplar de la biblioteca que no me dejó tanta impresión como los propios (que leía y releía). No obstante me ha encantado leerlo ya de adulta. Me ha parecido una historia fantástica en que una peculiar niña, que parece sacar todo lo bueno de los que se le acercan, deberá enfrentarse a un ejército de hombres grises que se dedican a robar sigilosamente el tiempo a los humanos. Destacaría, aparte de la imaginación que desborda el relato, esa crítica implícita a este mundo moderno en que parece que no hay tiempo para nada y que no se aprecian los pequeños placeres cotidianos. Una pequeña pausa en las lecturas cotidianas que te hace sonreír y volver a ese mundo de fantasía de la infancia. Según la contraportada está recomendado a partir de 12 años. Muy recomendable.
Esther Rodríguez
Desde la infancia, cuando leí “La historia interminable” y alguna obra más del autor, que no caía un libro de Ende en mis manos. Y ha vuelto a ser un placer leerlo. “La historia interminable” ya forma parte de los eternos y gratos recuerdos de infancia, pero leer a Ende en edad adulta no es para menos.
“Momo” es una novela juvenil, pero yo no la he leído hasta ahora, y puedo decir que si en la infancia puede ser divertida y emocionante, de adulto hay mucha reflexión que es válida aún en la actualidad.
Esta obra cuenta la existencia de “Momo”, una niña huérfana, que se instala en las ruinas de un anfiteatro, a las afueras de una gran ciudad.
Al poco tiempo de su llegada se hace amiga de gran parte de los vecinos, adultos y niños, que viven cerca del lugar, gente de recursos humildes, sencilla y solidaria.
Todos ayudan a Momo a instalarse en las ruinas, un espacio apartado del bullicio y evocador. No es casual que el propio Ende al inicio de la novela hiciera referencia a ese tipo de lugares, pues era un enamorado de Italia y su cultura, esas referencias a mi me han parecido interesantes, sobre todo para los pequeños que tengan curiosidad y lean la historia de Momo.
Hasta el momento la vida de Momo trascurre con alegría, los niños disfrutan jugando en el lugar, muchos vecinos vienen a verla y comparten con ella parte de sus vidas, sus preocupaciones e ilusiones, Momo es una niña que sabe escuchar.
Pero hay una amenaza silenciosa y siniestra que pondrá patas arriba todo su mundo, los hombres grises, que consumen el tiempo de la gente, quitándoles el tiempo que destinan a cosas “inútiles”, es decir no productivas o no útiles para el futuro. Debido a estos hombres, poco a poco la gente dejará de disfrutar de las pequeñas cosas, las visitas a los amigos, al cine, los juegos en la calle, etc. Momo, con su capacidad de escucha, sensibilidad e inteligencia deberá enfrentarse a ellos, junto a la tortuga Casiopea.
Me he gustado mucho, pese al tono juvenil, pienso que “Momo” contiene mensajes para adultos que nos deberían hacer reflexionar sobre la vida, la forma en que gestionamos el tiempo, cómo valoramos o enfrentamos las cosas que hacemos, el día a día y sobre todo, como los adultos pueden implicarse más y mejor en la vida de los pequeños. Muy recomendable.
“Momo” es una novela juvenil, pero yo no la he leído hasta ahora, y puedo decir que si en la infancia puede ser divertida y emocionante, de adulto hay mucha reflexión que es válida aún en la actualidad.
Esta obra cuenta la existencia de “Momo”, una niña huérfana, que se instala en las ruinas de un anfiteatro, a las afueras de una gran ciudad.
Al poco tiempo de su llegada se hace amiga de gran parte de los vecinos, adultos y niños, que viven cerca del lugar, gente de recursos humildes, sencilla y solidaria.
Todos ayudan a Momo a instalarse en las ruinas, un espacio apartado del bullicio y evocador. No es casual que el propio Ende al inicio de la novela hiciera referencia a ese tipo de lugares, pues era un enamorado de Italia y su cultura, esas referencias a mi me han parecido interesantes, sobre todo para los pequeños que tengan curiosidad y lean la historia de Momo.
Hasta el momento la vida de Momo trascurre con alegría, los niños disfrutan jugando en el lugar, muchos vecinos vienen a verla y comparten con ella parte de sus vidas, sus preocupaciones e ilusiones, Momo es una niña que sabe escuchar.
Pero hay una amenaza silenciosa y siniestra que pondrá patas arriba todo su mundo, los hombres grises, que consumen el tiempo de la gente, quitándoles el tiempo que destinan a cosas “inútiles”, es decir no productivas o no útiles para el futuro. Debido a estos hombres, poco a poco la gente dejará de disfrutar de las pequeñas cosas, las visitas a los amigos, al cine, los juegos en la calle, etc. Momo, con su capacidad de escucha, sensibilidad e inteligencia deberá enfrentarse a ellos, junto a la tortuga Casiopea.
Me he gustado mucho, pese al tono juvenil, pienso que “Momo” contiene mensajes para adultos que nos deberían hacer reflexionar sobre la vida, la forma en que gestionamos el tiempo, cómo valoramos o enfrentamos las cosas que hacemos, el día a día y sobre todo, como los adultos pueden implicarse más y mejor en la vida de los pequeños. Muy recomendable.
Dolors Martínez
"Existe una cosa muy misteriosa, pero muy cotidiana. Todo el mundo participa de ella, todo el mundo la conoce, pero muy pocos se paran a pensar el ella. Casi todos se limitan a tomarla como viene, sin hacer preguntas. Esta cosa es el tiempo. Hay calendarios y relojes para medirlo, pero eso significa poco, porque todos sabemos que, a veces, una hora puede parecernos una eternidad, y otra, en cambio, pasa en un instante; depende de lo que hagamos durante esa hora. Porque el tiempo es vida. Y la vida reside en el corazón".
La novela para niños Momo, del alemán Michael Ende, fue el libro del mes de Mayo 2020 en el Club de Lectura de Literatura+1 en plena pandemia del COVID19.
Aunque es una novela para niños, la filosofía que despliega y las enseñanzas que imparte son tanto para niños como para adultos.
Con la vital metáfora de que el corazón humano es como un reloj que con su palpitar nos marca el tic-tac de nuestro tiempo de vida, Ende, en esta historia maravillosa, equipara al tiempo con la vida, y desarrolla unas lecciones admirables donde expone la viperina influencia de la publicidad en favor del consumismo.
El consumismo y sus nefastas consecuencias en el sentido de robarnos, en forma indirecta, el tiempo: el tiempo de la vida, el tiempo del amor, el tiempo de la amistad, el tiempo de la familia, el tiempo de los hijos, el tiempo del descanso ...
Un continuo lavado de cerebro repiquetea en los comerciales que nos agreden constantemente en todos los medios de comunicación y en las vallas publicitarias ... comprar .. comprar ... comprar ... creándonos necesidades falsas y artificiales, haciéndonos sentir que deseamos objetos o servicios que no tenemos; que es una prioridad causar envidia a los demás, adquiriendo lujos, que cuestan mucho dinero y hay que pagar con el sudor de nuestra frente ... sudor que nos roba el tiempo irremplazable de compartir con nuestros hijos a los que engañamos comprándoles más y más juguetes inútiles, mientras nosotros trabajamos "overtime" para ganar más dinero para pagar más deudas, convirtiéndonos en "workaholics".
"—Te pertenezco. Por eso te envidian todos … Quiero tener más cosas." Dice Bebenín, la muñeca perfecta, dada a Momo como señuelo por los hombres grises. Y esa es la frase dogmática del consumismo: hay que comprar todo lo que los demás tienen ...
y porque también lo que compramos causa envidia a otros ... comprar comprar y comprar y después, botar botar y botar, porque ya no hay espacio donde guardar todo lo que se adquiere ... vivir lleno de deudas y sin tener ahorros ni para emergencias... ni tiempo para vivir la vida ...
Un mortal círculo vicioso donde caen los incautos y una vez adentro ya es casi imposible salirse de la trampa.
Ende, con su estilo sencillo y su historia llena de clásicos simbolismos, de colorida fantasía y personajes tiernos unos y terríficos otros, nos predica esta lección de vida y nos previene del vicio de adquirir necesidades artificiales y del peligro de perder nuestro tiempo de vida en excesos de faena, para pagar compromisos adquiridos sin verdadera utilidad.
Concluyo con esta oración: "Yo necesito poco, y lo poco que necesito, lo necesito poco". Santa Teresa de Calcuta.
"Tres hermanos viven en una casa: son de veras diferentes; si quieres distinguirlos, los tres se parecen. El primero no está: ha de venir. El segundo no está: ya se fue. Sólo está el tercero, menor de todos; sin él, no existirían los otros. Aun así, el tercero sólo existe porque en el segundo se convierte el primero. Si quieres mirarlo no ves más que otro de sus hermanos. Dime pues: ¿los tres son uno?, ¿o sólo dos?, ¿o ninguno? Si sabes cómo se llaman reconocerás tres soberanos. Juntos reinan en un país que ellos son. En eso son iguales".
Momo, fue un libro que leí en mi adolescencia, pero no amé, tal vez porque en lo personal, creo que no todos los niños lo comprenden bien, a pesar de haberse escrito para ellos, posiblemente si se leyera con un adulto cambiaría todo.
Ahora gracias al club de lectura lo releo y lo adopto en mis libros favoritos.
Me llamó mucho la atención que pese a la fecha en que se publicó, pareciera que retrata la vida actual, ¿Será qué, el tiempo en su mágico "tic tac", es cíclico? o ¿pasa en cualquier época de la vida?
La narrativa es hermosa porque habla del valor que le damos al tiempo, creemos que es demasiado y no sopesamos que se va como agua entre las manos y si a eso le agregamos el tiempo que pasamos sin pasar (Trabajando, discutiendo por todo, atorados en el tráfico, etc.), nos vamos quedando con muy poco del verdadero tiempo medido en nuestras horas astrosas.
—¿Qué es una hora astrosa? —preguntó Momo. —En el curso del mundo hay de vez en cuando momentos —explicó el maestro Hora— en que las cosas y los seres, hasta lo alto de los astros, colaboran de un modo muy especial, de modo que puede ocurrir algo que no habría sido posible ni antes ni después. Por desgracia, los hombres no son demasiado afortunados al usarlas, de modo que las horas astrosas pasan, muchas veces, sin que nadie se dé cuenta. Pero si hay alguien que la reconoce, pasan grandes cosas en el mundo.
CITA: "Creo profundamente en la existencia de las horas astrosas. Puedo detectar en mi vida varias de ellas: momentos en los que hasta el viento conspiraba para girar en redondo y soplar a mi favor. Algunos los aproveché al máximo, otros los compartí y, tristemente, también hubo unos que se desperdiciaron.
Para evitar el arrepentimiento, hoy decido vivir como si todo el tiempo fuera una hora astrosa que se prolonga indefinidamente. No se sabe qué ocurrirá, pero siempre existe la posibilidad para un milagro".
De la web... Palabras más, palabras menos.
Michael Ende supo utilizar el género literario de la fantasía y desbordó su imaginación en sus personajes como: Momo, una niña descalza y vagabunda, que no es de ningún lado, no tiene edad ni familia, pero que supo priorizar su tiempo disfrutando a la gente que le rodeaba y gozaba escuchando las risas de los demás niños y las conversaciones profundas de el buen Beppo y los cuentos de Gigi; Así fue como de ser solo una pequeña más, se ganó el cariño de todos, hasta que aparecen los hombres de gris que se alimentan del tiempo de los humanos y convencen a todos sus amigos a destinar su horas en generar más dinero para tener muchas cosas materiales. Por tal motivo, Momo, ayudada por la bella tortuga Casiopea y el maestro Hora, se dan a la tarea de rescatar a sus amigos.
La hermosa narrativa cargada de metáforas sobre el tiempo, la amistad, la libertad de pensamiento, inundan la obra.
Nos exhorta a enfrentar a los hombres de gris que nos roban nuestro tiempo feliz, ese que pasamos con quién queremos, el que te roban para no soñar, amar, imaginar, leer, hasta que como un suspiro nuestra Flor horaria que solo florece una vez, se apaga.
Michael Ende nos llevó a viajar con el tiempo para comprender lo que perdemos para siempre... "El mismo tiempo".
CITA: «Existe una cosa muy misteriosa, pero muy cotidiana, todo el mundo participa de ella, todo el mundo la conoce, pero muy pocos se paran a pensar en ella. Casi todos se limitan a tomarla como viene, sin hacer preguntas. Esta cosa es el tiempo.
Hay calendarios y relojes para medirlo, pero eso significa poco, porque todos sabemos que, a veces, una hora puede parecernos una eternidad y otra, en cambio, pasa en un instante, depende de lo que hagamos durante esa hora.
Porque el tiempo es vida y la vida reside en el corazón».
"Existe una cosa muy misteriosa, pero muy cotidiana. Todo el mundo participa de ella, todo el mundo la conoce, pero muy pocos se paran a pensar el ella. Casi todos se limitan a tomarla como viene, sin hacer preguntas. Esta cosa es el tiempo. Hay calendarios y relojes para medirlo, pero eso significa poco, porque todos sabemos que, a veces, una hora puede parecernos una eternidad, y otra, en cambio, pasa en un instante; depende de lo que hagamos durante esa hora. Porque el tiempo es vida. Y la vida reside en el corazón".
La novela para niños Momo, del alemán Michael Ende, fue el libro del mes de Mayo 2020 en el Club de Lectura de Literatura+1 en plena pandemia del COVID19.
Aunque es una novela para niños, la filosofía que despliega y las enseñanzas que imparte son tanto para niños como para adultos.
Con la vital metáfora de que el corazón humano es como un reloj que con su palpitar nos marca el tic-tac de nuestro tiempo de vida, Ende, en esta historia maravillosa, equipara al tiempo con la vida, y desarrolla unas lecciones admirables donde expone la viperina influencia de la publicidad en favor del consumismo.
El consumismo y sus nefastas consecuencias en el sentido de robarnos, en forma indirecta, el tiempo: el tiempo de la vida, el tiempo del amor, el tiempo de la amistad, el tiempo de la familia, el tiempo de los hijos, el tiempo del descanso ...
Un continuo lavado de cerebro repiquetea en los comerciales que nos agreden constantemente en todos los medios de comunicación y en las vallas publicitarias ... comprar .. comprar ... comprar ... creándonos necesidades falsas y artificiales, haciéndonos sentir que deseamos objetos o servicios que no tenemos; que es una prioridad causar envidia a los demás, adquiriendo lujos, que cuestan mucho dinero y hay que pagar con el sudor de nuestra frente ... sudor que nos roba el tiempo irremplazable de compartir con nuestros hijos a los que engañamos comprándoles más y más juguetes inútiles, mientras nosotros trabajamos "overtime" para ganar más dinero para pagar más deudas, convirtiéndonos en "workaholics".
"—Te pertenezco. Por eso te envidian todos … Quiero tener más cosas." Dice Bebenín, la muñeca perfecta, dada a Momo como señuelo por los hombres grises. Y esa es la frase dogmática del consumismo: hay que comprar todo lo que los demás tienen ...
y porque también lo que compramos causa envidia a otros ... comprar comprar y comprar y después, botar botar y botar, porque ya no hay espacio donde guardar todo lo que se adquiere ... vivir lleno de deudas y sin tener ahorros ni para emergencias... ni tiempo para vivir la vida ...
Un mortal círculo vicioso donde caen los incautos y una vez adentro ya es casi imposible salirse de la trampa.
Ende, con su estilo sencillo y su historia llena de clásicos simbolismos, de colorida fantasía y personajes tiernos unos y terríficos otros, nos predica esta lección de vida y nos previene del vicio de adquirir necesidades artificiales y del peligro de perder nuestro tiempo de vida en excesos de faena, para pagar compromisos adquiridos sin verdadera utilidad.
Concluyo con esta oración: "Yo necesito poco, y lo poco que necesito, lo necesito poco". Santa Teresa de Calcuta.
"Tres hermanos viven en una casa: son de veras diferentes; si quieres distinguirlos, los tres se parecen. El primero no está: ha de venir. El segundo no está: ya se fue. Sólo está el tercero, menor de todos; sin él, no existirían los otros. Aun así, el tercero sólo existe porque en el segundo se convierte el primero. Si quieres mirarlo no ves más que otro de sus hermanos. Dime pues: ¿los tres son uno?, ¿o sólo dos?, ¿o ninguno? Si sabes cómo se llaman reconocerás tres soberanos. Juntos reinan en un país que ellos son. En eso son iguales".
Lucila Argüello
Momo, fue un libro que leí en mi adolescencia, pero no amé, tal vez porque en lo personal, creo que no todos los niños lo comprenden bien, a pesar de haberse escrito para ellos, posiblemente si se leyera con un adulto cambiaría todo.
Ahora gracias al club de lectura lo releo y lo adopto en mis libros favoritos.
Me llamó mucho la atención que pese a la fecha en que se publicó, pareciera que retrata la vida actual, ¿Será qué, el tiempo en su mágico "tic tac", es cíclico? o ¿pasa en cualquier época de la vida?
La narrativa es hermosa porque habla del valor que le damos al tiempo, creemos que es demasiado y no sopesamos que se va como agua entre las manos y si a eso le agregamos el tiempo que pasamos sin pasar (Trabajando, discutiendo por todo, atorados en el tráfico, etc.), nos vamos quedando con muy poco del verdadero tiempo medido en nuestras horas astrosas.
—¿Qué es una hora astrosa? —preguntó Momo. —En el curso del mundo hay de vez en cuando momentos —explicó el maestro Hora— en que las cosas y los seres, hasta lo alto de los astros, colaboran de un modo muy especial, de modo que puede ocurrir algo que no habría sido posible ni antes ni después. Por desgracia, los hombres no son demasiado afortunados al usarlas, de modo que las horas astrosas pasan, muchas veces, sin que nadie se dé cuenta. Pero si hay alguien que la reconoce, pasan grandes cosas en el mundo.
CITA: "Creo profundamente en la existencia de las horas astrosas. Puedo detectar en mi vida varias de ellas: momentos en los que hasta el viento conspiraba para girar en redondo y soplar a mi favor. Algunos los aproveché al máximo, otros los compartí y, tristemente, también hubo unos que se desperdiciaron.
Para evitar el arrepentimiento, hoy decido vivir como si todo el tiempo fuera una hora astrosa que se prolonga indefinidamente. No se sabe qué ocurrirá, pero siempre existe la posibilidad para un milagro".
De la web... Palabras más, palabras menos.
Michael Ende supo utilizar el género literario de la fantasía y desbordó su imaginación en sus personajes como: Momo, una niña descalza y vagabunda, que no es de ningún lado, no tiene edad ni familia, pero que supo priorizar su tiempo disfrutando a la gente que le rodeaba y gozaba escuchando las risas de los demás niños y las conversaciones profundas de el buen Beppo y los cuentos de Gigi; Así fue como de ser solo una pequeña más, se ganó el cariño de todos, hasta que aparecen los hombres de gris que se alimentan del tiempo de los humanos y convencen a todos sus amigos a destinar su horas en generar más dinero para tener muchas cosas materiales. Por tal motivo, Momo, ayudada por la bella tortuga Casiopea y el maestro Hora, se dan a la tarea de rescatar a sus amigos.
La hermosa narrativa cargada de metáforas sobre el tiempo, la amistad, la libertad de pensamiento, inundan la obra.
Nos exhorta a enfrentar a los hombres de gris que nos roban nuestro tiempo feliz, ese que pasamos con quién queremos, el que te roban para no soñar, amar, imaginar, leer, hasta que como un suspiro nuestra Flor horaria que solo florece una vez, se apaga.
Michael Ende nos llevó a viajar con el tiempo para comprender lo que perdemos para siempre... "El mismo tiempo".
CITA: «Existe una cosa muy misteriosa, pero muy cotidiana, todo el mundo participa de ella, todo el mundo la conoce, pero muy pocos se paran a pensar en ella. Casi todos se limitan a tomarla como viene, sin hacer preguntas. Esta cosa es el tiempo.
Hay calendarios y relojes para medirlo, pero eso significa poco, porque todos sabemos que, a veces, una hora puede parecernos una eternidad y otra, en cambio, pasa en un instante, depende de lo que hagamos durante esa hora.
Porque el tiempo es vida y la vida reside en el corazón».
Blanca Toral
Muchas gracias por compartir ! Tengo intención de leerlo pronto
ResponderEliminar¡Lectura recomendada!
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