"Canadá", de Richard Ford

FICHA TÉCNICA:

Género: Novela

Traducción: Jesús Zulaika

Editorial: Anagrama

SINOPSIS:

Dell Parsons tiene quince años cuando sucede algo que marcará para siempre su vida: sus padres roban un banco y son detenidos. Su mundo y el de su hermana gemela Berner se desmorona en ese momento. Con los padres en la cárcel, Berner decide huir de la casa familiar en Montana. A Dell, un amigo de la familia le ayudará a cruzar la frontera canadiense con la esperanza de que allí pueda reiniciar su vida en mejores condiciones. En Canadá se hará cargo de él Arthur Remlinger, un americano enigmático cuya frialdad oculta un carácter sombrío y violento. Y en ese nuevo entorno, Dell reconducirá su vida y se enfrentará al mundo de los adultos. Una bellísima y profunda novela sobre la pérdida de la inocencia, sobre los lazos familiares y sobre el camino que uno recorre para alcanzar la madurez.

OPINIONES:

Me ha gustado muchísimo esta novela. Especialmente la voz narrativa. Un ingenuo e inocente chaval de quince años, cuya vida se ve convulsa por acontecimientos ajenos a él y que apenas comprende. Su evolución, sus sentimientos y su manera de adaptarse a las durísimas circunstancias en que se ve inmerso, nos son transmitidas de manera magistral por el autor, en un alarde de excelente narrativa. 
Considerada por varios sectores de la crítica como uno de los diez mejores libros del año, “Canadá” me ha parecido una novela dura e inquietante, que te atrapa, te envuelve y te deja huella.

Yolanda Castilla Galdos

Hace un tiempo me tropecé con este libro y desde que leí las primeras líneas me quedé con la intriga de seguir la trama, por fin le llegó su turno.
Esta es la historia de la familia Parsons, formada por el matrimonio de Bev y Neeva y los gemelos Dell y Berner. Esta nos sitúa en los años 50 hasta casi la actualidad, en diversos estados del norte de Estados Unidos y el sur de Canadá. El narrador es Dell, un Dell ya maduro que nos relata el acontecimiento que marcó el rumbo y la existencia de todos ellos. Cada cual lo sufrió y afrontó de distinta manera. El Dell que nos habla, 50 años después de los hechos, intenta dar una explicación coherente de lo sucedido, pero sobre todo parece que lo hace para sí mismo, para que el pasado tenga un sentido, por raro o complicado que parezca. Es una obra, por tanto, bastante introspectiva, y de hondos análisis psicológicos de los personajes, todo desde el punto de vista de Dell. Dell, además, será testigo de otros sucesos más graves, incluso, cuando traspase la frontera. Una vez en Canadá, la trama da un giro más misterioso aún. Por lo menos, desde mi experiencia lectora, ha habido momentos más intensos hacia la segunda mitad y el final.
En cuanto al estilo literario, es descriptivo, algo denso en algunas partes y a veces redundante, aunque quizá eso se pueda perdonar si se considera que esa repetición viene dada por la necesidad de Dell de auto esclarecer lo hecho y vivido. Asimismo, tanto la forma de narrar como los temas tratados me han recordado a la lectura de obras de Ian McEwan (la soledad, el micro universo de “Jardín de cemento”) o John Irving.
Por todo lo expuesto, concluyo, ha sido una lectura muy buena e interesante. Hasta me ha dado que pensar el quid de la cuestión que es, ¿cómo unas personas corrientes pueden acabar así?, y a ratos me ha sobrecogido la soledad de Dell o el modo en el que debió forjar su personalidad. Si alguien se siente tentado por lo aquí descrito, ya sabe lo que debe hacer.

Dolors Martínez