Género: Narrativa
Editorial: RBA
SINOPSIS:
Enric González amó Londres mucho antes de conocerla. Provisto de un plan de singular inconsistencia, decidió irse a Inglaterra a vivir del aire. Y lo consiguió. Para su fortuna, pudo vivir también de un sueldo de periodista, lo cual mejoró su nutrición de forma considerable. El periodismo y algunas circunstancias inesperadas le permitieron conocer decenas de personajes fascinantes y los pliegues más recónditos de una ciudad maravillosa: desde el palacio de Buckingham y el Parlamento hasta las callejas de Whitechapel, los antiguos estadios de fútbol o los túneles subterráneos. Este libro es una guía personal para descubrir el espíritu londinense. Fue escrito cuando el autor estaba ya en otro país y eso implica una cierta dosis de nostalgia, pudorosamente envuelta en ironía. Hubo otras ciudades después y otras pasiones, pero ningún amor es como el primero. Y ninguna ciudad es como Londres.
OPINIÓN:
El autor, periodista de profesión, narra su experiencia en la ciudad de Londres, donde vivió y trabajó varios años como corresponsal para el periódico El País.El libro se divide en tres partes, por zonas geográficas (El oeste, El centro y El este); cada una de ellas se compone de alrededor de una decena de breves historias, que se pueden leer como si de artículos periodísticos se tratara.
Con un estilo desenfadado y una buena dosis de ironía, describe la ciudad, con muchos detalles y curiosidades que pueden pasar desapercibidas al simple turista. Y no solo habla de barrios, edificios, historia, monarquía, la ciudad subterránea... sino que nos da también una lección sobre política inglesa, nos cuenta la historia de los numerosos equipos de fútbol de Londres (esta parte reconozco que se me ha hecho un poco larga) y multitud de otros temas y personajes, como Peter Pan y Jack el Destripador. No tiene nada que ver con una guía turística al uso, al contrario, precisamente relata aspectos que uno quisiera conocer y no siempre salen en las típicas guías; es una lectura complementaria muy interesante.
Además del carácter histórico y divulgativo sobre Londres, contiene también anécdotas e impresiones personales. En general, el contenido y el formato son muy amenos y hacen de su lectura una pequeña delicia.
Me parece un libro muy recomendable, en especial para los que ya conocen un poco la ciudad o tienen intención de visitarla; a través de estas crónicas el listado de lugares alternativos a los que ir aumentará considerablemente.
Esther Rodríguez
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