Género: Narrativa
Traducción: Carlos Mayor
Editorial: Sajalín
Traducción: Carlos Mayor
Editorial: Sajalín
SINOPSIS:
Durante la Gran Depresión, en Corinth, Carolina del Norte, no hay mucho que el joven granjero Jack McDonald pueda hacer además de beber una cerveza tras otra. Sin un céntimo y con una amenaza de embargo, Jack no duda en aceptar el empleo que su viejo compañero de colegio Smut Milligan le ofrece en su recién inaugurado salón de carretera, un lugar donde se sirve alcohol de fabricación casera, se juegan partidas clandestinas de cartas y se alquilan cabañas por horas. El continuo desfile de paisanos por el salón proporciona a Milligan buenos rendimientos, a menudo en forma de dinero, otras veces en forma de averiguaciones que, llegada la hora de liquidar deudas para seguir con el negocio, podrían resultar de vital importancia. Cuando el astuto y codicioso Smut ponga en práctica su brutal plan, a Jack le resultará difícil mantenerse al margen.
Durante la Gran Depresión, en Corinth, Carolina del Norte, no hay mucho que el joven granjero Jack McDonald pueda hacer además de beber una cerveza tras otra. Sin un céntimo y con una amenaza de embargo, Jack no duda en aceptar el empleo que su viejo compañero de colegio Smut Milligan le ofrece en su recién inaugurado salón de carretera, un lugar donde se sirve alcohol de fabricación casera, se juegan partidas clandestinas de cartas y se alquilan cabañas por horas. El continuo desfile de paisanos por el salón proporciona a Milligan buenos rendimientos, a menudo en forma de dinero, otras veces en forma de averiguaciones que, llegada la hora de liquidar deudas para seguir con el negocio, podrían resultar de vital importancia. Cuando el astuto y codicioso Smut ponga en práctica su brutal plan, a Jack le resultará difícil mantenerse al margen.
Publicada por primera vez en 1940 e inédita en castellano, Mal dadas podría
ubicarse entre la cruda narrativa de James M. Cain y los primeros
relatos de Ernest Hemingway. Una novela que, por su realismo sin
concesiones y su lenguaje directo, resultó avanzada para el gusto de los
lectores de su época, e impresionó a ilustres compatriotas como Raymond
Chandler, Flannery O’Connor o George V. Higgins.
OPINIÓN:
La
novela, ambientada en los años 30 de la Gran Depresión, resulta de una
apabullante actualidad: hipotecas, impuestos y deudas agobian a los
menos favorecidos y hacen más grandes a quienes mueven los hilos.
En este marco coinciden además un sheriff corrupto, un empresario adinerado, su desencantada esposa y un vecino de quien poco se sabe y mucho se sospecha para llevar al dueño de un local de carretera, tras una mala racha a las cartas y una letra a la que no puede hacer frente, a un vertiginoso camino sin vuelta atrás al que arrastrará a su mano derecha en el local.
Una suerte de retrato sureño combinado con novela negra muy entretenido, con pasajes verdaderamente escabrosos (en su fondo, el estilo es bastante contendido) y con un final poco predecible que me ha gustado bastante. La novela, publicada por primera vez en 1941, pasó bastante desapercibida a pesar de hacer las delicias Raymond Chandler, entre otros, tal vez debido a que el público no estaba preparado para lo que en ella se contaba.
En este marco coinciden además un sheriff corrupto, un empresario adinerado, su desencantada esposa y un vecino de quien poco se sabe y mucho se sospecha para llevar al dueño de un local de carretera, tras una mala racha a las cartas y una letra a la que no puede hacer frente, a un vertiginoso camino sin vuelta atrás al que arrastrará a su mano derecha en el local.
Una suerte de retrato sureño combinado con novela negra muy entretenido, con pasajes verdaderamente escabrosos (en su fondo, el estilo es bastante contendido) y con un final poco predecible que me ha gustado bastante. La novela, publicada por primera vez en 1941, pasó bastante desapercibida a pesar de hacer las delicias Raymond Chandler, entre otros, tal vez debido a que el público no estaba preparado para lo que en ella se contaba.
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