Género: Narrativa
Traducción: Raquel Vicedo
Editorial: Impedimenta
SINOPSIS:
Barnaby Gaunt tiene diez años y acaba de quedarse huérfano. Solo y
desamparado en la vida, ha de vivir con su tío, por lo que viaja a una
preciosa isla remota de la costa de Canadá, llena de amables ancianitos y
donde hay hasta un policía montado. A primera vista, todo indica que le
espera un verano perfecto. Salvo por un pequeño problema: su tío está
tratando de matarlo. Heredero de una fortuna de diez millones de
dólares, Barnaby se cansa de decirle a todo el mundo que su tío, un
hombre misterioso y aterrador, anda detrás de su herencia, pero nadie le
cree. Nadie salvo Christie, una niña rara y de poco comer, que llega a
la conclusión de que Barnaby solo puede detener a su demoniaco tío de
una manera: matándolo primero a él. Y así, con la ayuda de Una Oreja, un
puma salvaje a quien los isleños atormentan desde hace años, Christie y
Barnaby traman un plan infalible.
OPINIÓN:
“Matemos al tío” es una obra clásica de la literatura canadiense
que, sin embargo, no ha sido traducida al español hasta ahora, más de
medio siglo después de su publicación. La acción tiene lugar en una
pequeña isla en la que la vida transcurre de forma apacible hasta la
llegada de dos niños, Barnaby y Christie. Al principio no congenian,
pero pronto se convierten en inseparables, en parte porque son los
únicos niños de la isla, en parte porque
Barnaby le revela su gran secreto: su tío, que es su único familiar
vivo, quiere matarle para hacerse con su herencia, que asciende a diez
millones de dólares. La única forma de evitarlo es matar a su tío antes,
y los dos niños comienzan a planear el crimen.
Rohan O'Grady – seudónimo de June Skinner – da forma a una historia
ingeniosa y divertida, y a la vez siniestra y oscura. Los personajes
están perfectamente perfilados, llenos de claroscuros, y resulta curioso
lo entrañables que llegan a resultar en ciertos momentos. Además de a
los pequeños conspiradores, cabe destacar el personaje del sargento
Albert Coulter, Policía Montado severo pero de buen corazón, que ha de
soportar las no pocas quejas que generan los niños.
“Matemos al tío” es una novela gótica de culto, llena de chispa y protagonizada por unos pequeños aprendices de asesinos a los que es imposible no coger cariño. Es una gozada de lectura.
“Matemos al tío” es una novela gótica de culto, llena de chispa y protagonizada por unos pequeños aprendices de asesinos a los que es imposible no coger cariño. Es una gozada de lectura.
Ana Rayas
No la conocía y creo que me puede interesar.
ResponderEliminarMe alegra que mi comentario te haya descubierto esta novela, merece mucho la pena. Si te animas a leerlo, ya contarás qué tal. ¡Un saludo!
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