"Momoko y la gata", de Mariko Koike

FICHA TÉCNICA:

Género: Narrativa
Traducción: Gabriel Álvarez Martínez
Editorial: Lumen

SINOPSIS:

Desde la muerte de su madre, Momoko no se relaciona más que con su gata Lala. Pero cuando Masayo llega a su casa para ser su preceptora todo cambia, y nace entre ellas una tierna complicidad. Masayo poco a poco se enamora del padre de la niña, mientras que este solo parece tener ojos para su nueva amiga: la bella Chinatsu. La vida sigue su curso en un ambiente de mentiras y aparente calma hasta que, cuando la nieve cubre de silencio el jardín y los campos de trigo, afloran las pulsiones más oscuras y las verdades salen a la luz.
La gata Lala, la esfinge blanca, será la clave de esta sorprendente novela que funde, para fascinación del lector, la intriga con los sentimientos. Ganadora de los premios Naoki, Shibata Renzaburo e Yoshikawa Eiji de Literatura, Mariko Koike es uno de los grandes nombres de la literatura japonesa actual, junto con Haruki Murakami, Hiromi Kawakami y Yoko Ogawa.

OPINIÓN:

Tras la muerte de su madre, Momoko solo se relaciona con su gata Lala, una esfinge blanca que es todo para ella. No tiene amigos, no juega con los juguetes que le regalan y tampoco disfruta las fiestas que su padre celebra en el jardín de su mansión.
La llegada de Masayo, una joven a la que su padre ha contratado para que le de clases particulares y le haga compañía mientras él está fuera, trastoca el día a día en el hogar ya que, contra todo pronóstico, se establece un estrecho vínculo entre ambas.
Masayo, enamorada del padre de la niña, únicamente puede disfrutar de su compañía en las escasas ocasiones que él está en casa, ya que su corazón pertenece a otra mujer. No obstante, los lazos que ha establecido con Momoko y Lala la hacen muy feliz.
Y así pasan los días hasta que llega la nieve y las oscuras verdades salen a la luz…
“Momoko y la gata”, de Mariko Koike, es una historia escalofriante. Lo que comienza como una trágica historia familiar se transforma en una novela tensa y agobiante que terminas entre escalofríos.
Una novela corta e impactante que transforma la inocencia en perversidad y en la que lo único inmutable es el amor que Momoko siente por Lala.

Ana G. Aranda